¿Cuál es el camino seguro para perder peso?

Enero es el mes del cambio. Todo mundo inicia el año con grandes propósitos, sin que necesariamente sepan bien a bien qué quieren lograr o cómo alcanzarlo. Así que, cualquiera que sea la razón que tengas para modificar tu alimentación, es importante que lo hagas bien desde el principio. Acuérdate que los cambios deben ser graduales y los resultados medibles. Establece objetivos claros y concretos. Pon fechas, plazos o cifras alcanzables. Elige el mejor camino, aunque te tome más tiempo o esfuerzo. Recuerda que los atajos son callejones sin salida y, si los tomas, seguramente tendrás que volver a empezar.

Por lo qué, independientemente a la dieta que decidas seguir, toma en cuenta lo siguiente:

* Comienza el día CON AGUA. Las horas que pasas dormido (idealmente entre 6 y 8) deshidratan y lo primero que el cuerpo necesita no es un café o un jugo, es un buen vaso con agua sola.

Desayuno* ¡DESAYUNA! Después de tantas horas de sueño y ayuno, tu cuerpo busca activarse. Para ello necesita energía y la energía proviene de los alimentos. Quien se salta el desayuno. desaprovecha importantes horas de aceleración metabólica, por eso come algo en los primeros 30 minutos. Además, quien no desayuna no se puede controlar a media tarde y termina comiendo más.

* Come más seguido Consumir porciones pequeñas frecuentemente es mejor que porciones abundantes una o dos veces al día.

* Modera las grasas y aumenta las proteínas. Las proteínas magras (sin grasa) aportan vitaminas del complejo B que optimizan las funciones metabólicas generadoras de energía. Estas dietas dan sensación de saciedad por más tiempo. Además, procura que las grasas que consumas sean de calidad, es decir, de origen vegetal como semillas, aguacate, aceitunas o aceite (sin calentar).

* Elige sólo lo mejor. Para que tu cuerpo reciba alimentos de calidad sustituye lo que tiene grasa o azúcar por lo que no tiene y opta por las versiones que aporten menos calorías vacías y más nutrimentos. Es más, uno de los mejores hábitos que puedes implementar es eliminar los procesados, empacados e industrializados. Siempre lo natural será mejor.

* Sorprende a tu cuerpo y modifica tu rutina de entrenamiento. El cuerpo se acostumbra a todo y si siempre haces el mismo ejercicio gastarás cada vez menos calorías porque se va haciendo más eficiente ante el esfuerzo. Sorpréndelo con nuevas rutinas. Un día menos tiempo, pero más intenso, otro día más tiempo, pero con intervalos, etc. El chiste es ir cambiando tu rutina y así obligas al cuerpo a constantemente adaptarse al esfuerzo.

* Duerme. Quien no duerme lo suficiente, vive durante el día una terrible batalla hormonal. La grelina y la leptina, hormonas que dan sensación de hambre y saciedad, se regulan sólo cuando estamos descansados. Si no dormimos lo suficiente el cuerpo entra en señal de alerta, todo se desajusta y tenemos hambre insaciable e incontrolable todo el día. Recuerda que dormir restaura, regenera, sana.

Dormir

* FInalmente y, así de claro: ¡NO PASES HAMBRE, NUNCA! Una dieta donde pasas hambre no es una dieta para ti. Mejor come bien, suficiente, rico y variado. Elige alimentos que te nutran y los momentos correctos para consumirlos. Acuérdate, un cuerpo desnutrido seguirá pidiéndote comida hasta que consiga lo que necesita.

Aplica lo más que puedas de todo esto. Si tienes alguna duda o necesitas personalizar tu plan, asesórate con un especialista, son ellos quienes pueden orientarte para que tu esfuerzo valga la pena y logres, de la mejor manera posible, los cambios que estás buscando.

¿SABÍAS QUÉ…?
Los SUPLEMENTOS para perder peso NO SIRVEN

Suplementos para bajar de pesoLa industria de los suplementos es una industria millonaria que vende sólo “espejitos”. No garantizan ningún resultado y ponen en riesgo tu salud ofreciéndote magia. Te ofrecen lograr lo que sea sin esfuerzo y a una velocidad acelerada. Eso es imposible. No existe en el mercado ninguna sustancia que te ayude a perder peso sin poner en riesgo tu salud. No importa si en la etiqueta dice que es natural, libre de hormonas o de estimulantes, orgánico, probado científicamente, “avalado por”, sin efectos secundarios, que si no ves resultados te devuelven tu dinero, que cierto famoso lo recomienda, etc. Nada de eso es verdad. No importa lo que digan, los suplementos que se ofrecen como estrategia para perder peso son peligrosos.

Si necesitas convencerte por ti mismo o te interesa informarte más sobre el uso, riesgo y efecto de los muchos suplementos disponibles en el mercado, el Instituto Australiano del Deporte los investiga y clasifica periódicamente, mide científicamente resultados y riesgos potenciales de cada uno y lo publica en su página de internet. Aquí los sitios donde puedes revisar la información actualizada:

* Maughan RJ, Burke LM, Dvora J, et al. IOC consensus statement: dietary supplements and the high-performance athlete. Br J Sports Med (2018); 52:439-455. Consultado en: www.bjsm.bmj.com
* The AIS Sports Supplement Framework (2019). Consultado en: www.ais.gob.au

RECOMENDACIONES:
Para elegir el plan de alimentación correcto

Considerando que todo lo que comemos conforma nuestra dieta diaria, podríamos decir que existen tantas dietas como habitantes de este planeta. Sin embargo, no todos nos alimentamos como deberíamos hacerlo. Por ello hay quién busca asesoría de especialistas. Son ellos, los nutriólogos, quienes saben cómo organizar los tiempos de comida para que nuestros requerimientos queden cubiertos y es entonces que decimos: “estoy a dieta”.

NutriólogaEn la Federación Mexicana de Nutrición Deportiva, eso nos parece la mejor opción, la asesoría personalizada. Creemos que la asesoría de un profesional te llevará a “buen puerto”.

Sin embargo, también sabemos que los planes de alimentación los encontramos fácilmente en revistas, libros, páginas de internet, aplicaciones o por recomendación de conocidos o famosos. Pero ¿cómo saber si eso que tenemos frente a nosotros nos va a servir? Debe tener ciertas características y cubrir algunos requisitos. Utiliza esta pequeña guía para analizar a fondo cada una de las opciones que tienes y elije lo mejor.

El PLAN DE ALIMENTACIÓN CORRECTO para ti debe:
• Ajustarse a tus ingresos, gustos y horarios.
• Dejarte satisfecho.
• Hacerte sentir bien y con energía.
• Ayudarte a dormir mejor.
• Ser viable en cualquier lugar y situación.
• Reconocer los alimentos que te gustan y respetar los que no.
• Aportar nutrimentos y calorías suficientes.
• Considerar todos los grupos de alimentos.
• Tomar en cuenta antecedentes clínicos, patologías específicas o condiciones especiales.

Y NO DEBE:
• Recomendar uso de medicamentos, suplementos, súper alimentos o cualquier producto para garantizar resultados.
• Dejarte con hambre.
• Eliminar grupos de alimentos o tiempos de comida.
• Hacerte sentir cansado, ansioso, con antojos o de mal humor.
• Ser tan estricto que limite tu vida social o profesional.
• Eliminar la actividad física.
• Ser extremista, limitante y exagerado.
• Satanizar alimentos.

RECETA:
Dale un toque divertido a tu sopa de verduras

Después de días de comer en exceso, una buena sopa de verduras no sólo cae bien, sino que nos hace sentir que estamos recuperando el camino hacia la salud. Sin embargo, para muchos es un platillo soso y aburrido. Para que esto no te pase, te damos algunas ideas de ingredientes diferentes para que des un toque divertido a este platillo saludable.

Sopa de verduras con pastaPrueba agregar:
• Cebada perla
• Pasta
• Elote
• Quinoa
• Fideo de arroz
• Arroz
• Garbanzo
• Lenteja
• Alubia
• Frijol
• Huevo duro
• Carne molida
• Queso blanco
• Aguacate

Nutrición en movimiento –Boletín enero 2020
Por Federación Mexicana de Nutrición Deportiva (FMND) para: www.fmnd.org.mx/

Si quieres CORRER MEJOR define UN OBJETIVO para CADA DISTANCIA

Meb Keflezighi, ganador del Maratón de Boston en 2014, de Nueva York en 2009, Récord Nacional en los 10,000 metros en 2001 (27:13.98), Campeón Nacional en Cross Country en 2001, 2002 y 2009. Medallista de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y 4° lugar en las Olimpiadas de Londres 2012, comparte su plan de 5 pasos para asegurar que alcances cualquier objetivo que te propongas.

Tener objetivos forma parte de tu “mapa de ruta” hacia el éxito. No podrías acercarte siquiera a tu máximo potencial si no tuvieras objetivos bien definidos. Como seres humanos tenemos la capacidad de soñar lo que podría ser y luego descubrir cómo hacer realidad ese sueño.

Nunca hubiera ganado el Maratón de Boston y el de Nueva York, más una medalla Olímpica de plata sino hubiera establecido los objetivos para hacerlo. Quizá hubiera tenido ocasionalmente alguna buena competencia, pero no hubiera sido capaz de vencer regularmente a algunos de los mejores corredores del mundo. Todo lo que he logrado realizar físicamente corriendo empezó psicológicamente, con el simple pensamiento: “Quiero hacer esto”.

Es probable que pienses que tú no quieres tomar de la misma manera la carrera, que corres solo para aliviar el estrés y no para competir ni hacer nada más, y que tus objetivos están bien definidos en lo que respecta a los demás aspectos de tu vida. Pero quizá no te has percatado de que, probablemente, ya has definido algunas metas en tu carrera.

Cuando te levantas por las mañanas a correr (o a la hora que hagas tu deporte), no simplemente dices: “Voy a correr hasta que me canse”. Tienes ya un plan de ruta en la mente o una idea general de cuánto tiempo vas a durar corriendo (por ejemplo: “Voy a correr 30 minutos, una hora, etc.”). Es muy probable que tengas también definido cuántos días de la semana corres y qué días corres. Por lo que, sin darte cuenta, tienes definidos algunos objetivos básicos de la carrera, aún cuando nunca lo pensaste como objetivos. Pues bien, definir de una manera más formal tus metas ayudará a que disfrutes mucho más cuando corres.

Creo que los “BUENOS OBJETIVOS” tienen 5 elementos en común que hacen que su éxito sea más probable, y aquí los comparto:

1. Un BUEN OBJETIVO debe tener UN SIGNIFICADO PERSONAL

Nadie me dijo: “Tienes que ganar el Maratón de Boston de 2014”, o “Tienes que formar parte del Equipo Olímpico para Londres 2012”. Esos fueron objetivos que yo mismo me propuse. Cuando me dije: “Quiero ganar el Maratón de Boston”, me sentí bien; par empezar, CREÍ QUE PODÍA HACERLO y eso es muy importante, CREER QUE PODEMOS. Sabía que ese objetivo me motivaría a hacer todo lo necesario para lograrlo y también que requería de mi mejor esfuerzo para hacer lo mejor posible.

Meb Keflezigui entrenandoDe la misma manera, tus objetivos tendrían que motivarte igual. Deben ser cosas que tú quieres lograr para ti mismo, nunca para cumplir con las expectativas de alguien más. Entrenar para lograr un objetivo requiere de una gran cantidad de trabajo. Cuando te decides por algo que es muy complicado o difícil, ya sea física o psicológicamente, si el objetivo por el cual estás trabajando tiene un profundo significado par ti, encontrarás la manera de perseverar para lograrlo. Pero si alguien más confía en lograr el objetivo a través tuyo, cuando se presentan las dificultades pensarás: “Espera, pero ¿por qué estoy haciendo esto?”

La mayoría de nosotros tenemos suficientes áreas en nuestras vidas en donde tenemos que cumplir con las expectativas de alguien más. Permite que tu carrera sea sobre tus propias esperanzas y sueños.

2. Un BUEN OBJETIVO ES ESPECÍFICO

Observa cuan específico eran mis metas cuando me las propuse: “Quiero ganar el Maratón de Boston de 2014”. “Quiero formar parte del Equipo Olímpico en 2012”. No hay ninguna ambigüedad en ello. Sabía exactamente lo que quería hacer, y eso me ayudó a definir qué debería hacer para lograrlo.

Meb KeflezighiHe aquí un ejemplo de tiempo. A principios del 2001 una de mis metas para ese año era romper el Récord Estadounidense de los 10,000 metros. El tiempo que necesitaba superar era 27:20.56 No necesitaba ser más específico para saber la centésima de segundo que requería para alcanzar mi objetivo. Ese tiempo tan definido me decía exactamente a qué paso necesitaba correr en competencia y que tiempos tenía que dar en los entrenamientos. Gracias a esa guía proporcionada por mi objetivo específico pude correr es año en 27:13.98, imponiendo un nuevo Récord Nacional que duraría hasta el 2010.

Ahora consideremos que los objetivos que me hubiese propuesto fueran totalmente “generales” y no específicos, como por ejemplo: “Quiero correr bien en Boston”, o “Quiero correr más rápido los 10,000 metros”. “Correr bien” es totalmente subjetivo en lugar de decir “ganar Boston”. ¿Cómo sabría durante y después de la competencia si habría corrido bien? Y, ¿cómo sabría qué tenía que hacer y entrenar para alcanzar mi meta si solo digo “quiero correr bien”? Si digo simplemente quiero mejorar mi marca personal en 10 km todavía es un poco más específico porque tengo un TIEMPO definido que mejorar, pero aún así no causará la misma motivación que un objetivo personal y especial.

Por lo que es importante incluir el elemento específico o propio de cada objetivo: “Quiero correr 30 segundos más rápido mi marca personal en 10 km”, en lugar de solo decir: “Quiero correr más rápido”. O bien: “quiero correr 5 días a la semana”, en lugar de solo decir: “Quiero correr más”.

3. Un BUEN OBJETIVO es todo UN DESAFÍO PERO REAL

Tus objetivos deberán exigir salir de tu zona de comfort pero permaneciendo dentro de una realidad posible. Por ejemplo, si has corrido un Medio Maratón en 2:05 horas, tu próximo objetivo no debería ser correr otra vez en 2:05 puesto que no habría un nuevo reto, ¿qué motivación podría ser hacer lo mismo que ya has hecho antes?

Pero tampoco puedes irte a los extremos y decir: “Quiero bajar mi marca personal de Medio Maratón de 2:05 a 1:30”. Tu objetivo sería un reto enorme pero alcanzable solo en un tiempo razonable, esto es, tendrías que alcanzar ciertas metas por etapas para llegar a tu objetivo principal, por ejemplo decir: en dos meses quiero bajar mi tiempo de 2:05 a 1:58, después, en otro medio maratón quiero correr en 1:48, luego en 1:43 y así, sucesivamente, para que, después de varios medios maratones pueda llegar a mi objetivo tan deseado de correrlo en 1:30 Las carreras de larga distancia no son precisamente un deporte para las personas que quieren tener gratificación “al instante”.

Meb Keflezighi ganó el Maratón de Boston 2014“Ganar el Maratón de Boston en 2014” fue un objetivo real para mí, puesto que, mi caso, había finalizado en tercero y quinto lugar en los maratones de Boston anteriores, por lo que ganarlo no estaba fuera de mi alcance, era una posibilidad muy real. Tratar de ganar requería mucho trabajo, por supuesto, tenía el 15º mejor récord personal entre todos los corredores elite y la competencia sería 2 semanas antes de cumplir 39 años.

Un ejemplo de un objetivo demasiado ambicioso y no real hubiera sido decir: “Quiero romper el Récord Mundial en Boston”. Eso hubiera implicado bajar más de 5:30 minutos mi tiempo personal en Maratón, lo cual no es real en esta etapa de mi carrera.

4. Un BUEN OBJETIVO tiene el elemento TIEMPO

Parte de naturaleza humana es estar motivados por fechas límite. Tener una fecha en la cual deberás alcanzar tu objetivo ayudará a planear cómo y qué hacer para alcanzarlo. “Mi maratón es en 14 semanas, por lo que necesito un programa de entrenamiento desde hoy hasta el día de la competencia”, y darle su carácter de “urgencia”: “Si mi maratón es en 14 semanas tengo que empezar YA a entrenar”.

Cuando estaba entrenando para el Maratón de Boston del 2014, comenté a mi esposa, Yordanos, que sería mi última oportunidad para ganar esta competencia. Si en esa etapa de mi carrera hubiera dicho solamente: “Quiero ganar el Maratón de Boston algún día”, eso nunca hubiera sucedido.

Maratón de Boston 2014

Es interesante cómo manejar el factor “tiempo” al planear un objetivo. Si digo: “Quiero correr el Maratón de Nueva York este año” y faltan solo 2 semanas para la competencia y solo he estado corriendo 2 veces por semana, perdón pero que la suerte te acompañe para que no te lesiones. Pero si digo: “Quiero correr el Maratón de Nueva York en el 2025”, tampoco va a ser un objetivo que me motive mucho puesto que falta tanto tiempo que no hay sentido de “urgencia” para ponerse a entrenar.

Para la mayoría de los corredores, de 3 a 6 meses es un rango promedio para poder alcanzar tus metas. Es tiempo suficiente para hacer un buen entrenamiento y alcanzar tu objetivo y también te acerca en el tiempo para no perder la motivación del día a día que es básica.

Así pues, para alcanzar ese objetivo principal es importante establecer pequeños objetivos a corto plazo. Decide en donde quieres estar al final de cada mes, por ejemplo, enfocado siempre en tu objetivo principal; luego divide ese objetivo mensual en semanas para ir viendo tu progreso cada semana, enfocado a tu objetivo mensual y éste a tu objetivo final. Es más sencillo evaluar cada semana tu progreso. ¿Estás haciendo todo lo necesario para alcanzar tu meta principal? ¿O te estás estancando? Si no has progresado lo suficiente, quizá necesites posponer tu meta. Y ve todo esto más como aprendiendo de la experiencia que como un “fracaso”. Pregúntate “Dije que quería hacer esto pero eso no está sucediendo, ¿qué necesito hacer para tener resultados diferentes?”.

5. Un BUEN OBJETIVO te mantiene MOTIVADO

Acostumbro escribir mis objetivos para que no haya duda de qué es lo que quiero hacer. Aún están en “blanco y negro”: “Quiero hacer esto, quiero hacer aquello…”, si te pareces a mí, te darás cuenta de que ver regularmente tus objetivos es una manera de ser honesto.

Meb Keflezighi y su familia corrieron el RnR San DiegoPlatica tus objetivos solo con personas cercanas a ti. Hacerlo te facilitará mantenerte haciendo las cosas que necesitas para alcanzar tu meta. Si le comentas al amigo con quien acostumbras correr que quieres correr un maratón, será más fácil que te apoye y te anime constantemente en tus entrenamientos. Además, no te gustaría que tu amigo te dijera: “¿Cómo que no vamos a correr hoy? ¿Que no estás entrenando para un maratón?”

En los meses que estuve entrenando para el Maratón de Boston de 2014, Yordano me decía cuando veía que me estaba desvelando: “¿Qué no deberías estar ya durmiendo?”. La familia y los amigos siempre serán un apoyo en todo momento, en las buenas y cuando llegan las situaciones difíciles tambien. No digo que platiques a todo el mundo tus objetivos, pero sí comparte tus sueños con tu familia y con los amigos más cercanos, son ellos quienes se preocupan realmente por ti y quienes te cuidarán y te apoyarán para que logres todo lo que te propongas.

– (Con todos los demás, no te comprometas ni te entregues en exceso).

Este artículo ha sido adaptado del libro “Meb for Mortals” escrito por Meb Keflezigui con Scott Douglas.
Scott Douglas – Es un corredor con gran experiencia, acondicionador físico y periodista de la salud quien ha alcanzado posiciones Editoriales Senior en las revistas Runner’s World y Running Times.

Traducción y edición por Claudia Plasencia para: www.asdeporte.com

12 HÁBITOS para mejorar tu CARRERA y cualquier DEPORTE (Parte 2)

Lee AQUÍ PARTE 1: 12 HÁBITOS para mejorar tu CARRERA y cualquier DEPORTE…

7. COCINA EN CASA CON MAYOR FRECUENCIA

Shalane Flanagan, maratonista, cocina con Elyse KopeclyComer fuera de casa el algún restaurant implica grasa de más, calorías y sodio extra, lo cual nos sube de peso y eso afecta el ejercicio. Un estudio realizado por el Journal of Environmental and Public Health encontró que las personas que tienden a comer fuera de casa con frecuencia tienden a aumentar su Índice de Masa Corporal (IMC). No tienes que convertirte en un gran chef, solo aprender a cocinar tu propia comida y conocer así qué funciona mejor para ti.

Empieza AHORA. Si hace tiempo que no cocinas haz una “limpieza” de cocina para ver qué tienes. Trata de tener lo más común para cocinar como un juego de cuchillos, tabla para cortar, una olla mediana, un sartén, así como los ingredientes más comunes como aceite de oliva, sal y pimienta.

Piensa qué se te antoja comer. Puede ser tu platillo favorito o algo nuevo, busca la receta y haz la lista de lo que necesitarás; ve al mercado y compra lo necesario: carne, verduras, frutas, especies, yerbas de olor, yerbas para cocinar, etc. Empieza a cocinar, pronto le encontrarás el gusto y comer lo que cocinas. Prueba nuevos sabores, nuevos platillos y, seguro que te irá mejor en tus entrenamientos.

8. CORRE, RUEDA O NADA MÁS LARGO UN DÍA DE LA SEMANA

Distancia en la montañaEs importante incluir en el entrenamiento un día de distancia larga cada semana. En el caso de la carrera, después de 1:10 hora se puede considerar como distancia. Cuando entrenas por más de una hora, los capilares que transportan la sangre nutritiva a los músculos crecen, se dilatan, lo cual fortalece los huesos y ligamentos y los prepara para carreras de cualquier distancia. En el caso de los principiantes, ANTES de definir un día de distancia, es preferible enfocarse en correr 3 ó 4 veces por semana y después, cuando ya tengan cierta resistencia podrán empezar a aumentar el kilometraje.

Define un día de la semana para la distancia. Lo más aconsejable es hacerlo el fin de semana, sábado o domingo, ya que generalmente es el día que no vas a trabajar o a la escuela y tienes más tiempo para entrenar.

Aumenta la distancia cada semana. Podrás aumentar la distancia cada semana en un porcentaje no mayor al 10%, esto es, si corres 10 km de distancia la siguiente semana podrás correr 1 km más, es decir, 11 km, y así sucesivamente. De esta manera tu cuerpo se irá acostumbrando a la distancia sin riesgo de lesionarte. Registra tus entrenamientos y revisa cómo vas aumentando la distancia con tu entrenador.

Come e hidrátate bien. Tanto antes como después de la distancia, de manera que puedas entrenar bien, con energía y también después para recuperarte.

Encuentra nuevos lugares y amigos para entrenar largo. La distancia en cualquier deporte es mejor hacerla con amigos, el tiempo se pasa más fácil platicando además de que se van ayudando unos a otros. A veces, cuando te sientes ya cansado después de más de hora y media corriendo, un amigo puede ser de gran ayuda cuando te anima a seguir adelante y va corriendo delante de tí o a tu lado. Y en cuanto a los lugares, es bueno variar, no solo para no aburrirse del mismo sitio sino porque cada lugar es diferente. Si corremos en el Ajusco, por ejemplo, es montaña, con subidas y bajadas, entre el bosque, senderos angostos y otros no tanto, a una altitud mayor a los 3,000 msnm. Y si cambio corremos en Cuemanco, todo el terreno es plano, la mayor parte pavimentada, el circuito es de 5 km por lo que ahí puedes aprovechar para entrenar ritmo progresivo, mientras en la montaña el entrenamiento será de más fuerza. Ambos serán entrenamiento de distancia pero con condiciones diferentes, y ambos te van a servir como preparación para cualquier distancia más larga.

9. DORMIR LO SUFICIENTE

Pocos hábitos tienen tanto impacto en tu deporte y en tu salud en general como DORMIR BIEN. “Todo puede ponerse peor cuando no duermes lo suficiente; no solo afecta tu entrenamiento, afecta también tu trabajo, tu familia, tus relaciones”, dice Sapper. Mientras estás dormido tu cuerpo y tu mente se recargan de energía, reparando el daño ocasionado por el entrenamiento, liberando la hormona del crecimiento para desarrollar músculos y fortaleciendo conexiones entre los nervios y los músculos.

Dormida por cansancioPero, cuando no duermes bien, aun cuando tus ojos estén cerrados, todo eso se ve afectado, desde los límites en el almacenamiento del glucógeno muscular hasta el riesgo de lesiones, el mal humor, aumento de peso, y mayor posibilidad de enfermedades cardíacas y diabetes. La mayoría de las personas necesitan de 6 a 9 horas de sueño, por noche, para recuperarse; si con regularidad te vence el sueño en las reuniones de oficina, o si te desconectas de repente y cabeceas mucho en el trabajo, es muy probable que no estés durmiendo lo suficiente.

Declara la hora de irte a dormir como “sagrada”. Sabemos que cambiar un hábito no es fácil pero no imposible, y dormir bien es tan importante que habrá que hacer un gran esfuerzo por conseguir dormir mejor. Empieza durante un primer mes en donde te comprometas a dormir 30 minutos o incluso una hora ANTES de lo que acostumbras.

Dormir bien¡DESCONÉCTATE! Una hora antes de dormir APAGA TODAS LAS PANTALLAS, incluyendo celulares, televisión, tablets y computadoras. La luz azul que emiten atenúa la producción de la hormona del sueño melatonina. Y no te desesperes, en su lugar, aprovecha para hacer actividades que te relajen como leer un libro, por ejemplo, comenta Shelby Harris, Psy.D., Directora del Behavioral Sleep Medicine Program en el Montefiore Medical Center.

Cuida las bebidas con cafeína. Es importante considerar que consumir cafeína puede tardar hasta 6 horas su efecto de interrumpir el sueño, lo cual disminuye el efecto de descanso total mientras duermes sin darte cuenta, según un estudio publicado en el Journal of Clinical Sleep Medicine.
Prefiere dormir que correr más kilómetros. Si acostumbras correr en las mañanas pero te desvelaste, mejor recorta el tiempo corriendo que recortar las horas de sueño. De cualquier manera, si no tienes un buen descanso tu rendimiento corriendo o haciendo cualquier ejercicio no será el mejor.

10. USA BLOQUEADOR ANTES DE CADA CARRERA

(Confieso que, cuando leí el título de este punto pensé que no era necesario, que era algo exagerado, pero cuando leí el contenido completo me convencí de que SÍ es necesario – Claudia Plasencia).

Bloqueador, gorra y lentesUn estudio realizado en Austria encontró que los corredores de distancia larga presentaban más lunares irregulares y otros factores de riesgo de cáncer que los no deportistas. Mientas en Estados Unidos se estima que 1 de cada 5 americanos podrían desarrollar cáncer de piel. La luz utravioleta también es causa de arrugas, manchas marrones y otros daños en la piel, comenta el maratonista y dermatólogo en Boston Robin Travers, M.D. Afortunadamente, existen bloqueadores solares que pueden proteger tu piel de estas consecuencias. Si bien la luz del Sol se atenúa en los días nublados o de invierno, así como al amanecer o al atardecer, los rayos UVA que causan el cáncer AÚN BRILLAN, por lo que, a menos que todo tu entrenamiento sea bajo techo, debes acostumbrar protegerte con bloqueador en cada entrenamiento al aire libre, al menos tu cara.

Sube el Factor de protección SPF. Un factor de protección 15 puede proteger del cáncer de piel, pero sólo si usas la onza recomendada para proteger tu cuerpo, y la mayoría de la gente no lo hace. Es mejor elegir un factor de 45 SPF o más alto para asegurar la protección que necesitas, aún cuando escatimes y te pongas menos cantidad de la sugerida.

Haz que dure. La mayoría de los protectores solares contienen ingredientes activos que, paradójicamente, se descomponen después de 2 ó 3 horas a la luz utrlavioleta. Busca bloqueadores que contengan ingredientes “fotoestabilizados”, lo cual significa que pueden durar de 4 a 5 horas con una sola aplicación. Y asegúrate también de que sean “resistentes al agua por 80 minutos”, aunque, si bien los cambios recientes en el etiquetado significan que ningún protector solar puede ser resistente al sudor, estas fórmulas resisten la humedad por más tiempo, como comenta Darrell Rigel, M.D., portavoz de la American Academy of Dermatology.

Evita el bloqueador cerca de los ojos. Aplicar bloqueador en la cara solo debajo de los ojos y usa lentes de sol para protegerlos, así como correr con gorra.

11. ¡DESAYUNA TODOS LOS DÍAS!

Desayuno¿Sabías qué…? Los músculos solo pueden almacenar el glucógeno como energía entre 6 y 7 horas, lo que significa que al despertar en la mañana nuestro “almacen” de energía está completamente VACÍO. Es por ello que ES SÚPER IMPORTANTE DESAYUNAR. Una comida en la mañana ofrece la oportunidad de reponer energía y, de acuerdo al desayuno que comamos (tanto calidad como cantidad) será como funcionaremos el resto del día (si desayunas menos de lo que necesitas todo el día tendrás hambre y estarás cansado). Aunque no lo crean, para quienes quieren bajar de peso, un estudio demostró que personas a dieta que SÍ SE DESAYUNABAN DIARIO bajaron más de peso que quienes se “saltaban el desayuno”.

Desayuna algo en lugar de nada. Tu estómago necesita algo de comer, mínimo una fruta, cereal o algo para empezar, dice Plotnek.

Come un desayuno balanceado. Un buen desayuno debe contener de 300 a 400 calorías con la mitad de los productos, un cuarto de granos enteros y un cuarto de proteína magra. Si desayunas después de correr la proporción debería ser de 4:1 de carbohidratos a proteínas para que tu organismo empiece a reparar los músculos dañados durante el entrenamiento.

Prepara todo para el desayuno. Compra con antelación todo lo necesario para preparar los desayunos de toda la semana: fruta, avena, huevos, leche, yogurts, etc.

12. ¡SÍENTATE MENOS! Camina, muévete más

En general, las personas que trabajamos en oficina permanecemos SENTADOS un promedio de 11 HORAS CADA DÍA DE TRABAJO, (entre las 8 horas de trabajo, la hora de comida y mínimo una hora de transporte de casa a la oficina y de regreso, MUCHÍSIMO). Mientras estamos sentados los flexores de la cadera y los isquiotibiales se tensan, y nuestra postura de desploma, lo que aumenta el riesgo de lesiones, dice Ditsch. Varias investigaciones han probado los daños a la salud para las personas sedentarias, que además de no hacer ejercicio permanecen sentadas prácticamente todo el día, incluso los expertos lo llaman el problema de la “enfermedad sentada”. El buen hábito del ejercicio en sí solo no nos salvará de consecuencias como el aumento de peso o las enfermedades cardíacas, pero muchos estudios han demostrado que levantarse del asiento y caminar unos minutos varias veces al día puede marcar una gran diferencia.

¿Sabes cuánto tiempo permaneces sentado? ¡Te vas a sorprender! Algunos monitores como Polar y Garmin tienen entre sus funciones avisar cuando has permanecido sin moverte mucho tiempo con la finalidad de que te levantes y te muevas un poco. De acuerdo con un estudio realizado por Mayo Clinic Proceedings, quedarse sentado de 6 a 7 horas al día, perjudica tu estado físico, lo que podría ayudarse con una hora de carrera por día.

Establece “mini-metas”. Trata de no permanecer sentado por más de 2 horas. Si tu monitor te avisa que te muevas, levántate, estira y camina por unos minutos. Si tu monitor no te avisa, programa tu alarma para que te avisar cada 2 horas para moverte.

Busca estar más tiempo de pie. Si no es posible conseguir un escritorio alto para trabajar de pie, establece tus propias reglas, por ejemplo: si vas a llamar a alguien que está en tu misma oficina, mejor levántate y ve a buscarlo en lugar de marcar su extensión (así caminarás un poco), levántate cada vez que hablas por teléfono, elige permanecer de pie al fondo del salón en las juntas, prefiere usar las escaleras en lugar del elevador o ascensor.

Sabemos que adoptar UN BUEN HÁBITO no es fácil, pero trabajando y haciendo nuestro mejor esfuerzo, en poco tiempo será algo habitual para ti.

Mucha suerte y ¡FELIZ AÑO 2020!

PARTE 1: 12 HÁBITOS para mejorar tu CARRERA y cualquier DEPORTE…

Fuente:
Cindy Kuzma: Cindy es una escritora, autora y emisora independiente de salud y estado físico que ha contribuido regularmente a Runner’s World desde 2013.
www.runnersworld.com

Traducción y edición por Claudia Plasencia para: www.asdeporte.com

12 HÁBITOS para mejorar tu CARRERA y cualquier DEPORTE (Parte 1)

A los corredores, triatletas y cualquier persona que quiere hacer deporte nos encanta soñar, y SOÑAR EN GRANDE. Siempre estamos buscando nuevos retos: intentar una nueva distancia, mejorar la marca personal en cierta competencia, mejorar tu condición física, comer mejor, perder peso, correr nuestra primera competencia, empezar a hacer ejercicio, en fin, aceptamos grandes desafíos y queremos prepararnos para ellos.

Tom Holland, fisiólogo del deporte, nutriólogo, entrenador y autor de “The Marathon Method”, opina que “Los atletas que son consistentes con buenos hábitos pueden tener un mayor éxito”. Tener buenos hábitos no solo te ayudará a mejorar en tu deporte, sino también en tu vida en general.

Te compartimos 12 hábitos que han desarrollado y probado corredores y atletas con gran experiencia y bajo el consejo de especialistas en diferentes ramas del deporte.

1.- CORRE O HAZ EJERCICIO POR LAS MAÑANAS

Muchas personas prefieren correr o ejercitarse por la tarde o noche, pero con frecuencia entre los quehaceres de la familia, el trabajo que se alarga en la oficina o los compromisos sociales, a veces termina el día y ya no entrenaron. En cambio, como comenta Lisa Reichmann, entrandora de carrera, “Quienes hacen ejercicio por las mañanas no solo tienen ese sentimiento de que ya han hecho algo más mientras otros apenas se van a despertar, sino que también se llenan de esa energía positiva y endorfinas que brinda el deporte”.

Entrena de mañanaInténtalo. Empieza haciendo ejercicio en las mañanas 1 ó 2 días por semana, pensando que tienes los otros 5 para levantarte un poco más tarde. Trata de mantenerte motivado y asegúrate de acostarte más temprano la noche anterior para que puedas despertarte temprano sin problemas.

Prepara todo el día anterior. Deja lista la ropa con la que vas a correr, rodar o lo que sea (tenis, botella de agua, monitor, gorra y todo lo necesario para que no pierdas tiempo en la mañana). Y pon tu alarma del otro lado de la recámara, para que cuando suene tengas que levantarte a apagarla y no haya pretexto para regresar a la cama.

Cita a un amigo. Quedar con alguien para hacer ejercicio es la mejor razón para no fallar. Si quedas con alguien, aunque te de flojera piensas: “Ya quedé con este amigo, ni modo de dejarlo plantado”. Y ¿qué crees?, que él o ella piensa ¡exactamente lo mismo! por lo que los dos se deciden ir a entrenar y el entrenamiento acompañado siempre es más entretenido.

Date tiempo. Cualquier nuevo hábito requiere de un esfuerzo sobre todo al principio, pero poco a poco lograrás acostumbrarte. Ahora bien, cierto es que correr o ejercitarse de mañana puede no ser lo mejor para todos. Puedes probar uno o dos meses y, si no te funciona, vuelves a tu rutina y no te preocupes, que hay otros buenos hábitos que implementar.

2. HAZ ENTRENAMIENTO DE FUERZA CON REGULARIDAD

Ejercicios de fuerzaFortalecer tus músculos mejora tu salud, reduce el riesgo de lesiones y, de acuerdo con un artículo en la revista Sports Medicine, los ejercicios de fuerza mejoran tu rendimiento. En 26 estudios realizados en atletas de resistencia, los programas de entrenamiento de fuerza (ya sea pliométricos o levantamiento de pesas), aumentaron la condición física, incrementaron la eficiencia y mejoraron los tiempos de los corredores en distancias de 3 y 5 km.

Rebekah Mayer, manager de entrenamiento en el Life Time Run de Mineapolís, opina que tú mismo puedes definir tu entrenamiento de fuerza con 6 ejercicios básicos: 2 para cada uno de los grupos principales de músculos (cuerpo superior, abdomen y miembros inferiores). Haz un ejercicio trabajando la parte frontal (por ejemplo, planchas), y uno para la espalda (arcos o puentes), hazlos de 2 a 3 días por semana. Y si haces entrenamiento regular de fuerza deja días de descanso después de días de esfuerzo fuerte.

Incluye ejercicios de fuerza en tu entrenamiento. Si corres, por ejemplo, 5 km podrías hacer después 3 series de 15 sentadillas con una pierna al frente (alternado), planchas, lagartijas y “mountain climbers” o ejercicio del escalador el cual trabaja principalmente el nivel cardiovascular por el movimiento rápido de las piernas, pero también se trabajan brazos, abdomen y pecho. (Con ambas manos apoyadas en el suelo, separadas a lo ancho de los hombros y manteniendo los codos rectos, se coloca una pierna extendida y otra flexionada apoyando las puntas de los pies en el suelo, y se trata de acercar una pierna o la rodilla al pecho alternando una y otra pierna, como si fueras escalando). Para mejores resultados puedes hacer el entrenamiento el mismo día, después de un entrenamiento largo o intenso pero más tarde, quizá en la tarde-noche, para tener tiempo de recuperarte. Y después de esto deja un día completo de recuperación entre sesiones intensas o largas.

Aprovecha los tiempos libre del día. Por ejemplo, haz series de planchas cuando te levantas en la mañana, lagartijas antes de irte a trabajar y desplantes durante algún descanso en la oficina.

Toma alguna clase. Por ejemplo: Pilates son muy buenas para los ejercicios de fuerza, “Barre class” son ejercicios en una barra como las de ballet, o Body Pump.

Cambia con regularidad. Si sigues la rutina de ejercicios de fuerza 2 a 3 veces por semana, en un mes empezarás a notar los resultados, ya no te dolerán los brazos, piernas ni abdomen y podrás ir incrementando más repeticiones, más peso o diferentes ejercicios; de modo que irás mejorando, te sentirás más fuerte y mejorarán tus tiempos.

3. APLICA EL “CROSS-TRAINING”

Entrena en grupoEsto es “entrenamiento cruzado” que implica hacer otros deportes que complementen el principal. Por ejemplo, si corres 3 ó 4 veces por semana podrías incluir 1 ó 2 días más para practicar otros deportes aeróbicos como natación, ciclismo o remo que ayudarán a mejorar tu condición física sin el impacto y estrés del running.

Sé constante y realista. Una manera práctica de hacer cross-training es tomar una clase a la semana de spinning, pilates, natación, etc. Elije una clase que sí puedas asistir con regularidad.

Elige sabiamente. Si estás buscando mejorar una marca personal en carrera, escoge deportes específicos que la complementen, como son esquiar, cross-country o correr en el agua, pero si además deseas mejorar tu condición física en general puedes elegir natación o ciclismo.

Tómalo con calma. El cross-training será como un “descanso activo”; inclúyelo en tu entrenamiento después de una sesión intensa o larga. Y, por cierto, considera que un campamento de entrenamiento o clases de acondicionamiento físico que involucran correr NO son entrenamiento cruzado, eso sería seguir corriendo.

4. COME MÁS VERDURAS

VerdurasBajos en calorías y llenos de nutrientes las verduras deberían estar incluidos en la dieta de todo atleta. Su alta calidad de carbohidratos potencían tus entrenamientos y sus antioxidantes ayudan a recuperarte. Además, las verduras mantienen tu metabolismo regular y sus beneficios duran hasta cuando terminas de entrenar, cada porción diaria de vegetales (arriba de 5 porciones) reduce el riesgo de muerte prematura.

Disfruta tus favoritos. No es necesario comer lo que no te gusta, hay una amplia variedad de vegetales por lo que seguro encontrarás los que más te gusten.

Añade algo nuevo a tu menú. Prueba nuevas verduras y piensa cómo te las vas a comer, si las vas a combinar en una ensalada o acompañando como guarnición con algún guisado, o incluso como un snack.

Come primero las verduras. Trata de comerlas primero para evitar que te llenes con otra cosa antes de llegar a ellas.

Snack inteligente. En lugar de comer papitas y dulces prepara snacks sanos como combinar verduras con proteínas, por ejemplo: zanahorias con hummos o atún con rebanadas de pepino, o zanahorias rayadas con limón.

5. CALIENTA ANTES DE CORRER Y ESTIRA DESPUÉS

El movimiento repetitivo al correr va tensando los músculos, lo cual puede provocar una lesión, por eso antes de correr o de cualquier otro ejercicio es necesario preparar nuestro cuerpo con un breve “calentamiento”. Dedica unos 5 minutos haciendo estiramientos “DINÁMICOS”, que son ejercicios para flexionar las articulaciones suavemente con movimientos similares a los que harás cuando corras. Por ejemplo, empieza por levantar un poco la pierna hacia el frente y flexiona con la rodilla hacia el frente y hacia atrás. Haz unas 10 repeticiones con cada pierna. Luego levanta la pierna al frente y bájala, luego lo mismo con la otra pierna, como si fueras marchando, y deja que los brazos se muevan con el mismo movimiento de las piernas, como si fueras corriendo. Haz también círculos con cada pie, hacia uno y otro lado, para calentar los tobillos. Consulta más ejercicios de ESTIRAMIENTO DINÁMICO AQUI…

Estira DESPUÉS de correrDespués de estirar de manera “dinámica”, empieza a CAMINAR antes de correr, 1 ó 2 minutos, y solito empieza a TROTAR suave, y poco a poco empezarás a correr.

Al terminar el entrenamiento dedica otros 5 ó 10 minutos para hacer ahora estiramiento “ESTÁTICO”, que, como tus músculos y cuerpo están calientes después del ejercicio, puedes estirarlos más y mejorar tu flexibilidad. Consulta ejercicios de ESTIRAMIENTO “ESTÁTICO” AQUÍ…

Empieza poco a poco. Pero no dejes de hacerlos para que se conviertan en un buen hábito, antes y después de ejercitarte. Usa el rodillo para dar masaje a tus músculos al final del entrenamiento, especialmente después de sesiones intensas o muy largas.

Factor tiempo. Si te toca correr 45 minutos pero solo tienes 45 minutos para hacerlo, es preferible sacrificar unos minutos de carrera para calentar, al menos 3 a 5 minutos, y luego otros 5 minutos para aflojar o enfriar con los ejercicios de estiramiento estático. Pero no dejes de calentar antes de ejercitarte, ni de dar un tiempo para “aflojar” o enfriar después del ejercicio, para que también tu pulso normal se recupere.

6. “DESCONÉCTATE” AL MENOS UNA VEZ POR SEMANA

Para los corredores y deportistas en general que viven “pegados” al celular e internet, desconectarse al menos una vez por semana mientras entrenan les ayudará a conocerse mejor, a escuchar su respiración y estar atentos en qué momentos se agitan o esfuerzan más y cuando llevan un ritmo suave o un ritmo fuerte pero que lo aguantan por más tiempo. Correr sin audífonos te obliga a reconectarte contigo mismo, con tu paso y ritmo. Y aunque no hay ninguna duda de la gran motivación y fuerza que proporciona la música, quitarte los audífonos un par de veces ofrece otras ventajas. Podrás estar más atento a los sonidos del lugar donde estés corriendo, lo cual te hace estar más seguro (podrás escuchar si se acerca alguien, si viene un coche o una bici, etc.). Aprovecha también el estar desconectado para apreciar más el paisaje y escuchar mejor la plática de tus amigos que vienen corriendo contigo.

Corre LIBRE - DESCONECTADO de internet

Elige el mejor momento. Durante las carreras suaves, o en Trail, o cuando regresas después de alguna lesión, es importante estar muy atento a tu cuerpo, a tu respiración, a como te sientes, y si no tienes audífonos será más fácil que te concentres en ti mismo y sentir si estás realmente recuperado. Y si corres en la calle donde pasan coches NO uses audífonos, ahí más que nunca tendrás que estar muy atento y cuidadoso de los sonidos de la calle, más aún en nuestra ciudad.

Corre por tiempo. Medir algunas sesiones por tiempo en lugar de por distancia es muy sano y te permite conocerte más. Podrás correr más tranquilo durante más tiempo sin la presión de ir viendo a qué paso vas. Al final podrás checarlo en tu monitor y quizá te sorprenda del buen paso que llevabas y la distancia recorrida. O bien, si ves que corriste menos distancia y te costó más trabajo, seguramente estarás más cansado y tendrás que tomarte tiempo para recuperarte.

Continua PARTE 2: 12 Hábitos para mejorar tu carrera y cualquier deporte…

Fuente:
Cindy Kuzma: Cindy es una escritora, autora y emisora independiente de salud y estado físico que ha contribuido regularmente a Runner’s World desde 2013.
www.runnersworld.com

Traducción y edición por Claudia Plasencia para: www.asdeporte.com