A finales del mes de abril, Thomas Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), escribió una carta dirigida al Movimiento Olímpico titulada “Olimpismo y Corona”, en donde exponía “los desafíos que enfrentamos y el potencial de las oportunidades que tenemos”.
Ahora, cinco meses después, el 22 de septiembre, Bach escribió la continuación de dicha carta en donde nos muestra con optimismo como el deporte es reconocido como un factor esencial en la lucha contra la pandemia, y como los eventos deportivos que han empezado a realizarse lo hacen de manera muy segura y son bien recibidos no solo por atletas y organizadores de eventos, sino también por el público en general que ya añoraba los eventos deportivos como parte integral de sus vidas.
“Olimpismo y Corona II”
Desde el primer escrito de “Olimpismo y Corona” en abril, nuestro mensaje sobre los impactos positivos en la salud, sociales y económicos del deporte en la sociedad en general ha logrado un impulso considerable. Lo que podemos ver ahora es que el deporte es ampliamente reconocido como un factor esencial en la lucha contra la pandemia, la cual persiste aún en muchos países. El deporte también es aceptado como una parte integral de la solución para la recuperación de la crisis, que está en marcha en otros países.
Afortunadamente, también estamos viendo eventos deportivos en vivo nuevamente. La acogida muy positiva de estos eventos demuestra claramente que no solo los atletas y organizadores de eventos sino también el público en general ha estado añorando el regreso del deporte como parte integral de nuestras vidas. También vemos como el deporte puede organizarse de una forma segura aún bajo las restricciones vigentes por la pandemia. Esto debería darnos a todos confianza en nuestros preparativos para eventos futuros, incluidos los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Me gustaría agradecer a todas las personas quienes nos han llevado tan lejos gracias a su trabajo incansable para mantener a nuestra sociedad y a toda nuestra comunidad deportiva quienes están trabajando con gran responsabilidad y creatividad para organizar eventos deportivos, salvaguardando la salud de todos los interesados.
En base a los primeros eventos realizados con éxito, esperamos que llegue el momento cuando todas estas restricciones, las cuales son esenciales ahora, puedan disminuir. Pero tenemos que seguir actuando de manera responsable cuando se trata de planificar y programar nuestros eventos deportivos. El virus aún no está derrotado. Debemos seguir contribuyendo a su contención y ser parte de la solución para la recuperación de la crisis.
En nuestra planeación y programación tenemos todos una gran responsabilidad, no solo para nuestros respectivos interesados sino para toda la comunidad deportiva. Por experiencia sabemos que cada percance que nos afecta a uno de nosotros nos afecta a todos y tiene el potencial de deshacer el gran progreso que hemos logrado juntos en los últimos meses.
En este contexto, estamos monitoreando el potencial de métodos de prueba innovadores para la organización segura de los eventos. Además de los métodos de prueba ya existentes, hay una serie de las llamadas pruebas rápidas que ya están en el mercado o en desarrollo. Cuando se usa en combinación con otras contramedidas de virus, estas pruebas rápidas nos brindan una herramienta adicional importante para garantizar un entorno seguro para todos los involucrados.
Además de estas buenas noticias con respecto a las pruebas, hay señales muy alentadoras de la comunidad científica y médica sobre la disponibilidad de vacunas aprobadas en los próximos meses, tal vez incluso antes de finales de año.
En conjunto, los avances en las pruebas y en las vacunas facilitarán en gran medida la organización segura de los eventos deportivos. Todos deberíamos tomar en cuenta el momento en que estén disponibles todas estas herramientas cuando se trate de programar nuestros eventos. Por lo tanto, ante los múltiples escenarios que está planeando el COI, le hemos agregado uno para aprovechar al máximo el potencial de las pruebas y las vacunas.
Por un lado, en estas últimas semanas se ha demostrado que podemos organizar grandes eventos deportivos, en una forma segura incluso SIN vacuna. Por otro lado, tenemos que darnos cuenta de que incluso los métodos de prueba y las vacunas no son la “solución milagrosa” que resolverá todos nuestros problemas. Simplemente, aún no conocemos el impacto total de cualquier vacuna potencial. Pero, en conjunto, hay buenas razones para un optimismo cauteloso.
El Comité Olímpico Internacional (COI) continuará estudiando esos desarrollos muy de cerca. También estamos evaluando que consecuencias tendrán para la organización de eventos deportivos, que van desde la necesidad de cambiar ciertas reglas de nuestras respectivas organizaciones hasta los aspectos médicos, económicos, sociales y logísticos. Con este fin, continuaremos cooperando estrechamente con la Organización Mundial de la Salud, las autoridades públicas, los expertos médicos y científicos así como las compañías farmacéuticas. También estamos basándonos en la experiencia de aquellas organizaciones deportivas que recientemente han organizado eventos de manera exitosa. Por supuesto, compartiremos cualquier idea con todos los interesados entre ustedes, para que todos los que formamos parte del Movimiento Olímpico podamos beneficiarnos.
Hemos demostrado en los últimos meses que somos #StrongerTogether (Juntos somos más fuertes). En este espíritu de solidaridad, debemos continuar haciendo nuestra contribución a la contención del virus y a la recuperación de la crisis. De antemano, me gustaría agradecerles mucho por su continua cooperación en nuestro esfuerzo compartido para dar esperanza y confianza al mundo a través del deporte.
Lausanne, 22 de septiembre 2020
Introducción y traducción por Claudia Plasencia para: www.asdeporte.com