¿HAMBRE FÍSICA o EMOCIONAL? ¡Escucha tu cuerpo!

El entrenamiento deportivo puede afectar nuestro apetito (o hambre), incrementándolo o disminuyéndolo. Sin embargo, no es el único factor que afecta nuestro consumo de alimentos, también las emociones cuentan y es importante que lo consideres. Nuestro cuerpo está lleno de señales, emociones, impulsos y deseos. Y todo está regulado para satisfacer demandas específicas.

En muchas ocasiones, probablemente más de una vez al día, percibimos señales para comer cierto tipo de alimentos, pero ¿cómo sabemos si esa señal viene de un origen físico o emocional?

¿Te has puesto a pensar por qué sentimos el deseo de comer (aunque apenas hayamos terminado nuestro desayuno, comida o cena)? O bien, cuando experimentamos ciertos sentimientos.

Si te lo has preguntado ¡no te preocupes! nos pasa a todos, y esto es porque nuestro cuerpo no sólo satisface necesidades de energía, sino que busca también satisfacer necesidades sociales, físicas, psicológicas, etc.

Amigas comen con hambre

 

SABÍAS QUE HAY…
Cuatro TIPS para diferenciar el “Hambre FÍSICA” del “Hambre EMOCIONAL”

1. El hambre física, como lo indica su nombre, genera sensaciones en el cuerpo. Esto provoca que los intestinos comiencen a hacer movimientos y ruidos. Además, puede existir cansancio, dolor de cabeza, disminución de energía, etc.

2. El hambre física comúnmente genera mal humor sino se satisface en un cierto período. De ahí el término “hangry”, por la mezcla de palabras en inglés de hambre (hungry) y enojo (anger).

3. El hambre emocional, por otro lado, está orientada hacia un alimento más específico, como algo dulce, salado, algo relacionado con una experiencia social, o que involucre emociones positivas como calma, alegría o placer inmediato.

4. El hambre emocional suele estar asociada con experiencias y emociones específica como el deseo por tú helado de chocolate favorito al estar triste, o por algún alimento en específico que traiga recuerdos de amor, buenos tiempos, infancia, etc.

CONSEJOS
Para evitar el hambre excesiva

– Estructura tus horarios para tener siempre o al menos la mayor parte del tiempo, los mismos horarios de desayuno, comida y cena.

– Incluye colaciones entre tus comidas para no llegar con tanta hambre, reduciendo largos periodos de ayuno.

– Es una buena opción incluir proteína y grasas de calidad en las colaciones para que tengan función de satisfacer el hambre entre comidas, ejemplos de esto pueden ser tortitas de arroz con crema de cacahuate, verduras con hummus, sándwich de jamón con queso y aguacate, etc.

– Atiende tus necesidades emocionales, ¿estás estresado, preocupado, ansioso, etc? Busca ayuda, habla, escucha música, medita… ¡desahógate! Tu cuerpo te habla más de lo que crees.

 

Sandwich jamón, queso y aguacate

RECETA:
Snacks de atún con mango

Aquí te dejamos una receta para cualquier tipo de hambre que tengas.

¡Ideal para colación o cena mezclando lo salado con lo dulce! Rápido y saludable

Pepino con atún y mangoIngredientes:

½ Pepino cortado en rodajas
1 Lata atún drenado en agua
1 Apio cortado en trozos
½ Mango picado
Cebolla al gusto
½ Chile jalapeño picado
1-2 Cucharadas yogurt griego
Sal y pimienta
1 Limón
Chile tajín

Preparación:

Lavar y cortar el mango y las verduras.
Mezclar el atún con el apio, mango, cebolla, chile, yogurt, sal, pimienta y limón.
Acomodar con una cuchara la mezcla sobre las rodajas de pepino.
Agregar chile Tajín al gusto.
¡Listo!

Nutrición en movimiento –Boletín septiembre 2021
Por la Federación Mexicana de Nutrición Deportiva (FMND) para: www.asdeporte.com