Cuando nace el bebé se debe poner en la glándula mamaria para que provoque la formación de leche, ya que al mismo tiempo se estimula el desarrollo del cóndilo mandibular (hueso de la parte superior de la mandíbula), el cual se localiza adelante del oído. Esto ayudará a tener una buena mordida y evitar que truene la mandíbula al momento de abrir la boca.
Es importante que si la madre tiene mucha leche alimente al bebé por medio de una mamila con poco flujo, de lo contrario el bebé no estará estimulando su desarrollo; pero cuando la madre tiene poca leche el bebé está haciendo un buen esfuerzo y además no llega a atragantarse.
En caso de no poder alimentarlo con leche materna o es poca la producción de ésta, existe la fórmula, la cual debe ser indicada por el pediatra así como la dosificación. Es fundamental recordar que los biberones no tengan el orificio de salida muy grande, ya que pasaría lo mismo que cuando la madre tiene mucha leche, se debe conseguir biberones con flujo medio. Limpieza bucal
Es elemental que posterior a la alimentación se haga una limpieza bucal con una gasa estéril, enrollada en el dedo medio e índice de la siguiente manera: abrir despacio la boca del lactante y con las puntas de los dedos limpiar lo más posterior sin que esto provoque asco al bebé. Hay que recordar que la salida de los dientes primarios será entre el quinto mes de nacido y se completa hasta los 24 meses.
Para evitar caries
En las farmacias se pueden encontrar gotas de flúor que pueden utilizarse en el bebé a partir de los 0 meses de edad, para evitar la formación de caries y obtener de esta manera una buena dentadura.
El inculcar buenos hábitos a los niños desde muy temprana edad puede lograr que sean unos adolescentes y adultos sin problemas y sin traumas por esto mismo el prevenir es lo mejor. NULL