Llamada una enfermedad metabólica por impedir la correcta utilización de la glucosa sanguínea, la diabetes no impide que te puedas ejercitar, al contrario, el ejercicio te ayudará a mejorar tu salud claro está, siguiendo algunos lineamientos.
Si eres un diabético tipo I, porque requieres de insulina, es importante que:
• Informes a tu médico que te estás ejercitando y si eres frecuente, ya que de esto podría depender la modificación en tu dosis de insulina.
• Si tienes menos de una hora que te inyectaron insulina, no entrenes el músculo o los músculos afectados.
• Deberás saber la hora de la acción de la insulina, ya que tampoco en estos momentos podrás ejercitarte. Infórmate con tu médico muy bien de esto.
• Es conveniente, a menos que tengas una instrucción contraria de tu médico, que consumas carbohidratos antes y durante el ejercicio prolongado.
• Ten a la mano un poco de azúcar, por si llegaras a necesitarla.
• Hidrátate
• No te ejercites si tienes algún síntoma de hipoglicemia: fatiga excesiva, mareo, náuseas, dolor de cabeza, manchas en la visión, confusión, temblores o taquicardia.
Si deseas ejercitarte:
Diabético tipo I. Puedes trabajar los dos sistemas de entrenamiento, tanto aeróbico como anaeróbico, pero siempre deberás tomar en cuenta la indicación de tu médico para poder entrenarte.
Haz ejercicio 30 minutos por lo menos cada tercer día a intensidad moderada, para evitar que la insulina se metabolice rápidamente y puedas tener un sock de hipoglicemia. De esta forma moderada irás obteniendo beneficios que ayudarán a mejorar tu salud y ir entrenando mayor número de días.
Si eres diábetico tipo II. No eres dependiente de insulina, puedes entrenar aeróbico o anaeróbicamente de tres a cinco veces por semana, por lapsos de una hora, esto te ayudará a metabolizar mejor la insulina.
Sugerencias:
Si eres principiante en el área del ejercicio es conveniente comenzar a intensidad moderada, tres veces a la semana e ir aumentando conforme el cuerpo lo va pidiendo. Lo ideas es que te ejercites cinco veces a la semana por lo menos una hora para obtener mayores beneficios fisiológicos.
Recuerda siempre estar en comunicación con tu médico para estar en control, comunicar al instructor o entrenador de la enfermedad que se padece y así hacer un buen equipo para evitar sorpresas desagradables, pero sobre todo para lograr beneficios para tu salud.
Antonia García Gómez
Colaboradora Revista fitness.com.mx NULL NULL