Todo parece estar listo para el gran encuentro olímpico de Londres 2012: delegaciones, increíbles estadios, coberturas mediáticas sin precedentes y, por supuesto, los sistemas de control antidopaje que cada cuatro años se enfrentan a nuevos desafíos, pues las trampas se van refinando. En esta ocasión, la Agencia Mundial Antidopaje [WADA] parece llevarle la delantera a los atletas que juegan sucio. Como en El Señor de los Anillos, ya tiene preparado su Gran Ojo.
A diferencia de Sauron, el Comité Olímpico Internacional no tiene que buscar un solo anillo de poder, sino que tendrá que escrutar con ojo minucioso a todos los que probablemente hayan consumido alguna súper espinaca prohibida, pues además de los medios tradicionales de dopaje, tendrá que estar preparado para detectar el dopaje genético y las nuevas sustancias para las que aún no se ha creado una forma de control.
Lo mismo que el señor obscuro, la WADA cuenta con un aliado poderoso que en esta ocasión hará las veces de Saruman: la firma farmacéutica GlaxoSmithKline, que le brindará asesoría sobre medicamentos en etapa de desarrollo que podrían ser utilizados para potenciar las capacidades atléticas.
Juntos, WADA y GlaxoSmithKline han dado a conocer sus planes para mantener el control de dopaje durante Londres 2012, a escasos 30 kilómetros del centro olímpico se encuentra ya montado el fenomenal laboratorio-búnker que albergará a 150 especialistas del King’s College de Londres.
Este numeroso equipo realizará cerca de 6 mil 250 pruebas antidopaje durante los Juegos Olímpicos, lo cual significa que casi uno de cada dos atletas será sometido a los controles… y por cierto, si eres de los que afirma que en los deportes Paralímpicos todo es esfuerzo y lecciones de vida, la WADA no está tan convencida, así es que también su control incluirá a los atletas de estas disciplinas.
¿Paranoia? Muchos parecen pensarlo tras las declaraciones que John Fahey, el presidente de la WADA, soltara a la prensa el día en que se dio a conocer su convenio con GlaxoSmithKline: los atletas que se dopen deben saber que hay una gran posibilidad de que sean controlados este verano y que se hará todo lo posible científicamente para asegurar que sus esfuerzos para hacer trampas sean detectados por los expertos del laboratorio.
Podría creerse que más que una campaña de concientización parece una amenaza: no se escondan, brujas, o quemaremos a todas las mujeres. Sin embargo, tanto el Comité Olímpico Internacional como la
WADA tienen motivos de peso que justifican este control férreo, unos ejemplos: • Helder Ornelas, el fondista portugués, recientemente fue sancionado con cuatro años fuera de competencias debido a las anormalidades detectadas en su pasaporte biológico.
• El ciclista francés Sébastien Turgot se encuentra bajo la lupa y de encontrarle culpable de dopaje, la Comisión de Disciplina de la Federación Francesa de Ciclismo lo castigaría con dos años y una fuerte multa.
• Gastón Rodríguez, nadador argentino, también estará fuera de competencias durante un año y tres meses por determinación de la WADA, tras encontrar irregularidades en sus pruebas.
Y aunque muchos deportistas presentan apelaciones ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo para evadir las sanciones de la WADA y desconfían de ella, lo cierto es que tras una larga historia de escandalosos casos de dopaje, este organismo no pretende aparentar debilidad en Londres 2012.