El exceso de grasa por si solo ya es malo. De entrada, incrementa el riesgo de un paro cardiaco. Pero sus consecuencias, además del sobrepeso, han sido poco tratadas. Casi nadie habla, por ejemplo, de la retención de líquidos, que es más común de lo que podría suponerse.
En el caso de los deportistas, es frecuente que se quiera perder peso mediante dietas controladas y rutinas de ejercicio bien planeadas, y sin embargo no haya resultados. O que se quiera aumentar la masa muscular y no haya avances notables. En tales casos habría que analizar, primero, si nuestro organismo esta reteniendo líquidos, y después la causa, que normalmente está relacionada a una disfunción renal o a un porcentaje elevado de grasa corporal.
Pocas veces se llega al fondo del problema y por ello es complicado tratar la retención de líquidos. Los estudios apuntan casi siempre a trastornos hormonales, circulatorios, cardiacos o sanguíneos, pero casi nunca se toma en cuenta que todos están relacionados con el exceso de grasa y colesterol en el organismo.
Eliminar líquidos eliminado grasa
Es sencillo: si los líquidos no se encuentran en las venas y las arterias, el riñón no podrá eliminarlos y se mantendrán en el organismo. En realidad no hay medicamento para resolver el problema, lo que se requiere es un cambio de hábitos alimenticios en el que básicamente se ingieran menos grasas y sales, y contrario a lo que pudiera deducirse por lógica, lo recomendable es la ingesta constante de líquidos.
Y las consecuencias?
De no atender a tiempo este padecimiento, las consecuencias pueden ser aumento de peso inexplicable (incluso de un día hacia otro), piernas o brazos hinchados, sensación de pesadez, calambres, aceleración del ritmo cardiaco y celulitis. Si notas inflamación en alguna parte de tu cuerpo, una forma sencilla para detectar si se trata de retención de líquidos es presionar la zona hinchada durante unos segundos, y si queda una marca que tarda en desaparecer, deberías cuidar más tu alimentación y revisar tu porcentaje de grasa actual.
Si bien la recomendación general es acudir a revisiones médicas periódicas, aquí te presentamos una guía para prevenir la retención de líquidos relacionada con el exceso de grasa:
– Bebe suficiente agua, hasta dos litros diarios
– El mejor ejercicio para eliminar grasa son las rutinas aeróbicas
– En tu dieta incluye suficientes proteínas, además de pasta y arroz
– El descanso es importante. Procura dormir ocho horas diarias
– No uses ropa demasiado ajustada
– Usa medicamentos diuréticos solo bajo prescripción médica. NULL